Kiril Vassilev (1971) es un poeta y crítico de arte búlgaro. Es autor de los poemarios Tres poemas (2004), Las hojas ausentes (2010) y Provincias (2015). Sus poemas, traducciones y textos de crítica literaria han sido publicados en las revistas GRANTA, Sezon, Altera, Stranitsa, Literaturen Vestnik, Nueva Poesía Social, entre otros. Entre los años 2016 y 2019 dirige la columna sobre arte en el periódico Кultura. Su labor ha sido premiada en diferentes ocasiones. Egresado de la Universidad de Sofía, es doctor en Teoría e Historia de la Cultura. Ha trabajado como maestro, periodista, librero y conservador de museo. Actualmente enseña Historia de la Cultura Moderna en la Universidad de Sofía.
Домашно Ден след като видях как светът бухва като хляб и невидима ръка го чупи и раздава вървя бавно по алеята в парка сред боровете заглъхващи в мрака знам че не мога да им помогна само спирам за миг и кимвам с глава всеки сам се прибира у дома да се учи как се умира | Hogareño Un día después de ver cómo el mundo se fermenta como el pan y cómo una mano invisible lo rompe y lo reparte voy andando lentamente por la arboleda del parque entre pinos desvaneciéndose en lo oscuro sé que no puedo ayudarles solamente me detengo un instante y les asiento cada uno vuelve solo a casa para aprender cómo se muere |
Ремонт на покрива Коминът е рухнал просто отказва дима и пепелта ни и керемидите за пренареждане са твърде много но когато се качим на покрива и видим ясно онова което приближава ще имаме ли сили да довършим работата си или ще се вкореним сред изгнилите греди и спуканите керемиди и ще мълчим с отворени очи | Reforma del techo La chimenea se ha derrumbado simplemente rechaza nuestro humo y nuestras cenizas y las tejas que hay que volver a poner son demasiadas pero cuando nos subamos al tejado y veamos bien aquello que se está acercando tendremos acaso fuerzas para terminar nuestro trabajo o nos aferraremos entre las vigas podridas y las tejas agrietadas y permaneceremos callados con los ojos abiertos |
Струва си Да видиш отблизо как старостта влиза бавно в морето носейки умиращата плът като тотем с който си проправя път към дълбините да видиш сиянието на белите коси и небето прекрачващо безкрайността си за да открие онзи единствен нюанс на синьото който тези коси заслужават и налудно нежната усмивка когато гребенът на вълната се залюлява миг преди пяната да се разхвърчи за да скрие всичко останало което все още не бива да виждаш | Vale la pena Ver de cerca cómo la vejez se adentra lentamente en el mar arrastrando la carne moribunda como un tótem con la que hacerse el camino hacia las profundidades Ver el resplandor del cabello canoso y el cielo saltándose así su infinidad para encontrar aquel único matiz azul que estos cabellos merecen y delirantemente la tierna sonrisa cuando la cresta de la ola se mece un instante antes de que la espuma se disperse para ocultar todo lo demás que aún no debes ver |
Traducción del búlgaro de Marco Vidal González y Katya Gérova
De Hermanos del polvo: 6 poetas búlgaros contemporáneos
Más poesía:
- Aleksandar Guérov: Tres poemas
- Aleksandar Vutimski: Poemas a un muchacho
- Kamelia Shtéreva: Carpe diem
- Vladimir Sabourín: Pero quiénes sois vosotros
Deja una respuesta